El Hospital Viamed Montecanal realiza la primera cirugía general con el robot Da Vinci en Aragón
Un equipo formado por el cirujano general Rafael Villalobos y los urólogos, Jorge Rioja, Jesús García-Magariño, David García Belmonte y Jaume Pelegrí, realizaba el pasado martes, una cirugía de pared abdominal compleja mediante el robot Da Vinci. La aplicación de esta tecnología a la cirugía de pared abdominal permite diferenciar las estructuras con mayor detalle y disección mucho más fina, precisa y minuciosa que disminuye la posibilidad de complicaciones y, en consecuencia, una recuperación postoperatoria más rápida para el paciente. El pasado mes de julio el Hospital Viamed Montecanal instaló el único robot Da Vinci de la Comunidad Autónoma. Desde entonces, el equipo urológico ha realizado ya más de cuarenta operaciones con esta tecnología.
El pasado martes se realizó por primera vez en Aragón una cirugía de pared abdominal compleja mediante el robot Da Vinci. La operación tuvo lugar en el Hospital Viamed Montecanal, que alberga el único robot de esta tecnología existente en la Comunidad Autónoma. Es la primera vez, además, que en el hospital se aplica esta tecnología a una patología diferente a las de tipo urológico, de las que ya se han practicado más de cuarenta operaciones desde el pasado mes de julio, fecha en la que se instaló el robot.
Un equipo formado por los doctores zaragozanos Jorge Rioja y Jesús García-Magariño, junto a los ilerdenses Rafael Villalobos, David García Belmonte y Jaume Pelegrí han sido los responsables de llevar a cabo esta novedosa cirugía.
En realidad, la operación consistía en una doble cirugía: la extirpación de la recidiva tumoral que sufría el paciente y al mismo tiempo reparar la hernia compleja, sin la necesidad de realizar grandes incisiones, con un tiempo quirúrgico más corto que por otro abordaje, con un menor sangrado, lo que se traducirá en una mayor recuperación, acortando así el postoperatorio en 24 o 48 horas.
Gracias a la implantación del robot Da Vinci en Viamed Montecanal se ha podido mejorar la seguridad del paciente, fundamentalmente en intervenciones como cánceres de próstata, vejiga o riñón. Con la aplicación del Da Vinci a la cirugía de pared abdominal se ha podido comprobar que la cirugía mínimamente invasiva da resultados que permiten una recuperación mucho más rápida para el paciente y en consecuencia poder regresar a su actividad cotidiana lo antes posible.
Esta cirugía mínimamente invasiva en pared abdominal empezó hace muchos años con la laparoscopia dando buenos resultados, pero desde hace unos años la cirugía robótica se ha ido imponiendo frente a la laparoscopia por diferentes motivos tanto para el paciente como para el cirujano. La visión tan clara y aumentada hace que se puedan diferenciar las estructuras con mayor detalle.
Además, el pequeño temblor del pulso del cirujano se anula completamente con una visión fija continuamente. Los movimientos de los instrumentos tienen una mayor capacidad de giro (como una mano humana) lo que permite una disección mucho más fina, precisa y minuciosa por lo que la posibilidad de complicaciones como infección, sangrado, daño en otros órganos sea casi nula. Todo ello permite en consecuencia un resultado favorable para el paciente con una recuperación postoperatoria más rápida.